martes, 1 de febrero de 2011

Confianza o acto de fe

Hoy es noticia el gran acuerdo que han firmado empresarios, sindicatos y gobierno. Un gran pacto social dicen que es. Supongo que en esencia lo será, no es discutible. Lo que ha llamado mi atención es que se toma como noticia el acuerdo, eso sí, sin mostrarlo, ya que aún no ha sido ratificado.
Cuando esta tarde he querido tener mas información, me he encontrado con un curioso titular en el periódico la Vanguardia que transcribo "Rubalcaba afirma que el acuerdo con empresarios y sindicatos dará confianza".
Ya, ahora resulta que vamos a tener que "comer confianza", me ha resultado genial. Sin entrar en discursos políticos, sólo me gustaría decir lo que creo que dirían miles de jóvenes a gobierno, sindicatos y empresarios. Señores, queremos confiar, queremos creer que esto va a mejorar, pero se nos habla de "brotes verdes" después de una crisis que ha dejado en casa a casi cinco millones de españoles. Realmente no nos piden que confiemos, nos piden un auténtico acto de fe, una creencia infinita en algo que hoy por hoy no está a nuestro alcance.
Después de leer esta noticia, a la que podemos llamar "tipo la casa de la pradera", me he encontrado otra, esta en el periódico el Mundo, que creo que no tiene desperdicio,diría que es de esas que deciden ponernos los pies en la tierra, y es la siguiente "el FMI advierte que el paro actual dejará una generación perdida para toda la vida", creo que esta se comenta por sí misma y es muestra del daño que un desempleo que ya supera el 20% hace a un país. Una generación perdida, confiemos en que las cotizaciones a efectos de calculo de pensiones para becarios nos ayuden y generen esa confianza que yo no termino de ver, es lo que tiene formar parte de una generación que ya se considera ausente, en fin, aunque no soy creyente, que Dios nos ampare...

1 comentario:

  1. De acuerdo con tu opinión, las cosas claras y el chocolate espeso. Sólo me gustaría apostillar que espero que todos esos millones que han saqueado los impresentables a costa de eso, de perder una generación de españoles, les remuerdan en la conciencia y ojalá no les dejen dormir por las noches. Que se les gangrenen los millones y les persigan por el averno donde terminarán sus vidas.

    ¿Dónde está la ética de los economistas y políticos? Ah! en la cuenta corriente y acabada en muchos ceros.

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