viernes, 4 de febrero de 2011

Sindicato, una definición algo imprecisa

Sindicato: Asociación de trabajadores constituida para la defensa y promoción de intereses profesionales, económicos o sociales de sus miembros.
Esta no es una definición personal, es el primer significado que nuestro diccionario de la lengua española da a esta palabra.
Suena idílico, ¿verdad? como si hablásemos de lo que estas asociaciones significan en otros lugares, llamémoslos Inglaterra, Francia o Alemania.
Pero es que cuando se habla de ideales, hay a quienes se les olvida que hablamos de interés general.  Como decía, Alemania podría ser un ejemplo de este concepto que en la sociedad española suena utópico, pues bien, ayer precisamente se producía la esperada convención entre España y Alemania, y Merkel y sus compatriotas volvían a darnos alguna que otra lección. Resulta que el presidente de la Confederación de Sindicatos Alemanes (DGB) en esta visita ha ridiculizado de forma notoria nuestro sistema de representación laboral. Parece ser que tiene que venir Michael Sommer (presidente de la confederación) para hacer ver a nuestros queridos sindicatos más representativos que para presumir de sindicalismo no es suficiente con hacer como que luchas por los derechos de los trabajadores, también tienes que defenderlos. 
Como española que soy, y con muchísima pena, sólo le diría al señor Sommer que tiene toda la razón, que defender los intereses de los trabajadores no es convocar una pseudo-huelga casi obligado por las circunstancias, es actuar con objetividad y autonomía, sí, autonomía, eso que nuestros sindicatos desconocen, que significa ser independiente de intereses políticos, pero bueno, ellos no podrían saber de que les hablo...
Pero así son las cosas, Toxo y Méndez son sindicalistas, y defienden tan bien a los trabajadores, que con gran empeño han contribuido a que un 20% de ellos no sufra madrugando para ir a trabajar cada día, muchas gracias a ambos, sin duda alguna, en ningún caso querríamos ser Alemania.

martes, 1 de febrero de 2011

Confianza o acto de fe

Hoy es noticia el gran acuerdo que han firmado empresarios, sindicatos y gobierno. Un gran pacto social dicen que es. Supongo que en esencia lo será, no es discutible. Lo que ha llamado mi atención es que se toma como noticia el acuerdo, eso sí, sin mostrarlo, ya que aún no ha sido ratificado.
Cuando esta tarde he querido tener mas información, me he encontrado con un curioso titular en el periódico la Vanguardia que transcribo "Rubalcaba afirma que el acuerdo con empresarios y sindicatos dará confianza".
Ya, ahora resulta que vamos a tener que "comer confianza", me ha resultado genial. Sin entrar en discursos políticos, sólo me gustaría decir lo que creo que dirían miles de jóvenes a gobierno, sindicatos y empresarios. Señores, queremos confiar, queremos creer que esto va a mejorar, pero se nos habla de "brotes verdes" después de una crisis que ha dejado en casa a casi cinco millones de españoles. Realmente no nos piden que confiemos, nos piden un auténtico acto de fe, una creencia infinita en algo que hoy por hoy no está a nuestro alcance.
Después de leer esta noticia, a la que podemos llamar "tipo la casa de la pradera", me he encontrado otra, esta en el periódico el Mundo, que creo que no tiene desperdicio,diría que es de esas que deciden ponernos los pies en la tierra, y es la siguiente "el FMI advierte que el paro actual dejará una generación perdida para toda la vida", creo que esta se comenta por sí misma y es muestra del daño que un desempleo que ya supera el 20% hace a un país. Una generación perdida, confiemos en que las cotizaciones a efectos de calculo de pensiones para becarios nos ayuden y generen esa confianza que yo no termino de ver, es lo que tiene formar parte de una generación que ya se considera ausente, en fin, aunque no soy creyente, que Dios nos ampare...

lunes, 31 de enero de 2011

Convenios: porqué no ser más papista que el Papa

Cuantas veces hemos oído en nuestro trabajo hablar de los convenios en distintos usos y siempre bajo el mismo interés (el de la empresa, claro). Hoy vamos a darle otro contenido, o el mismo quizá , pero desde su vertiente real.
Me gustaría aclarar que un convenio no es una veleta, no gira según creamos oportuno. En él se expresan los derechos y deberes (sí, también deberes) que empresa y trabajadores deben asumir en la relación laboral.
Darle un uso inadecuado a un convenio colectivo, o decidir aplicarlo o no según se ajuste a nuestros intereses además de ser un error, puede significar una privación de derechos, a los que el estatuto de los trabajadores da cabida y reconoce como válidos.
Por ello, y sin retractarme de todo esto, quiero recordar que el convenio no vincula unilateralmente al empresario, es un vínculo de doble sentido, es decir, para que su aplicación sea correcta no puede medirse por el rasero de la empresa y sus visicitudes (que ahora no son pocas claro está) pero tampoco por el del trabajador que reclame sus derechos, pero no le importe dejar a un lado sus obligaciones. Por supuesto no estoy generalizando, pero todos sabemos del típico compañero que se sabe perfectamente los pluses, complementos salariales, importe de horas extra, etc... 
Acabo aclarando a todos los que sois trabajadores que los convenios colectivos son de obligado cumplimiento, considerándose su contenido como mínimo legal (en todo lo referido a cuestiones salariales) o máximo (jornada laboral). Espero que todo esto demuestre la realidad de este asunto, un convenio aplicado correctamente beneficia tanto a trabajadores como a empresarios.

domingo, 30 de enero de 2011

La reforma de las pensiones: un millón de dudas...

Por fin, la madrugada del 28 gobierno y sindicatos terminaron sus negociaciones sobre la reforma que desde hace tanto discuten. Con el tiempo casi finalizado y en el último momento conocíamos la noticia: 38 años y medio.
Esa era la cabecera de todos los telediarios, pero explicaciones pocas. Cuando este viernes salí a desayunar, dos señores a mi lado comentaban la barbaridad que se había hecho. No es posible decían, " antes necesitabas trabajar 15 años y ahora casi 40, que manera de explotar al trabajador".
Supongo que para cualquiera que lo pensara así sería claramente un ejemplo de explotación. Por ello, para intentar arrojar algo de luz en este pozo de años cotizados y afectados o no por la reforma, publico mi primer post centrándome en este asunto, que creo tiene bastante trascendencia.
En primer lugar, aclarar que los 38 años y medio cotizados se exigen para aquellas personas que quieran jubilarse con 65 años y cobrar la totalidad de la pensión de jubilación. Antes de la reforma, para poder percibir el 100% de la prestación era necesario tener cotizados 35 años. Como sabemos, de forma generalizada se extiende la edad de jubilación hasta los 67 años, exigiéndose en este caso 37 años cotizados.
En segundo lugar, me gustaría explicar el porqué esa confusión generalizada con los 15 años de cotización.
En el sistema español de pensiones, para acceder a una pensión contributiva se exige una cotización mínima de 15 años. Por tanto, no es que cotizando 15 años tengas derecho al 100% , es que a partir de 15 años tienes derecho a cobrar pensión por tu trabajo, que pienso, es bastante diferente.
Hay quien también piensa que se cobra el 100% con 15 años cotizados porque es de donde se toma la base reguladora para el cálculo de la pensión. Es decir, que para realizar el cálculo de la pensión hasta ahora se tomaban los últimos 15 años cotizados. Con la reforma laboral, esto también cambia, ya que tras la reforma este cálculo se realizará sobre los últimos 25 años, disminuyendo (de forma general) la cuantía de las pensiones.
Por último, en lo referente a las jubilaciones anticipadas, también hay cambios. Éstas,  reservadas para determinados grupos laborales se permitirán a partir de 63 años, 2 más que los actuales.
Aunque los cambios sean muchos, realmente no es tanta la diferencia, como hasta ahora, para poder acceder a una pensión hay que trabajar y cotizar, eso sí, ahora, un poco más.

Primeros pasos

Con una clara vocación hacia el tema laboral, hace ya unos años decidí empezar relaciones laborales para intentar comprender un poco lo que tenía a mi alrededor y desconocía.
Aunque siempre me ha gustado informarme, el millón de siglas y vocablos "extraños" que rodean este área de conocimiento dificultaba bastante mi objetivo.  
Supongo que como con todo lo que te gusta, poco a poco vas profundizando más y descubriendo cosas que ni imaginabas.
En un momento como el actual, en que todo se justifica con "la crisis" se hace casi necesario esclarecer la realidad y características del mercado laboral en que estamos inmersos.
Pues bien, actualmente me dedico a este mundillo y en esencia, este blog nace con la intención de relatar mi día a día y si es posible echar un mano a quienes anden tan perdidos como yo hace unos años.